Estrategia para la educación ambiental como componente de la formación ciudadana en la comunidad
universitaria
Luisa Marina Varea Alarcón
Aimara Batista Machado
Reinier Michel Medina Rodríguez
Volumen: 17
Número: 1
Año: 2025
Recepción: 25/09/2023 Aprobado: 13/11/2024
Artículo original
Los problemas que afectan al Medio Ambiente son cada vez más graves y causan
preocupación en todos los países del mundo. La Organización de Naciones Unidas para
la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO) reconoce que el Medio Ambiente de la
Tierra ha cambiado aceleradamente en los últimos años, al compararlo con otros
períodos de la historia, en el que aparece como una de sus principales causas la
interacción del hombre con la Naturaleza.
Hoy, cuando se valoran los problemas ambientales como una realidad de carácter
global, es una magnífica oportunidad para vincularse como una fuerza de acción en la
solución de estos, a través de una educación activa y participativa, con propuestas
valiosas, útiles e innovadoras, que sirvan para el progreso de la humanidad. De ahí que
a la Educación Superior le corresponde aportar una visión sintetizadora necesaria, para
comprender e interpretar la interacción naturaleza-sociedad a partir del enfoque
metodológico. Específicamente, en este trabajo se abordará la educación ambiental
para contribuir a la formación inicial de los estudiantes de la comunidad universitaria, al
diseñar una estrategia para su desarrollo.
En el artículo No. 27 de la Constitución de la República de Cuba (Asamblea Nacional
del Poder Popular, 2019), se plantea que el Estado protege el medio ambiente, los
recursos naturales del país. Además, que reconoce su estrecha relación y vinculación
con el desarrollo económico y social sostenible para hacer más racional la vida humana
y asegurar la supervivencia, el bienestar, la seguridad de las generaciones actuales y
futuras.
Por tanto, es deber de todos los ciudadanos contribuir a la protección de las aguas, la
atmósfera, los suelos, la flora, la fauna y todo el potencial de la naturaleza. Es muestra
de la voluntad del Estado y del Gobierno, que se aprovechen las posibilidades para la
formación integral de los estudiantes y potenciar la educación ambiental al prepararlos
para la vida, con conocimientos, hábitos, habilidades, capacidades y actitudes que le
permitan interrelacionarse adecuadamente con el medio ambiente y la sociedad.
Lo anterior exige desarrollar en la mente de los estudiantes universitarios una nueva
manera de ver al medio, al educar en lo conceptual y lo actitudinal, para contribuir al
desarrollo de una actitud ambiental positiva, mediante la solución de los problemas
ambientales a escala local, y tener en cuenta el papel que desempeñan las estrategias
curriculares, los vínculos con otras disciplinas y entre sus asignaturas.
En este proceso desempeñan un importante papel la forma de pensar y los estilos de
comportamiento de las personas y las comunidades; las políticas de los diferentes
sectores de la economía; de la ciencia, la educación y la cultura, sobre todo, la
existencia de una voluntad política y la capacidad para integrarlos a partir de la
aplicación de estrategias, programas y proyectos con la participación de la comunidad.
En tal sentido, es de vital importancia el papel que desempeñan los proyectos
investigativos en los que se deben vincular los estudiantes y profesores, para contribuir
a la formación ciudadana de profesionales altamente competentes y capacitados para
Página 244