Las Aulas Virtuales: herramientas para fortalecer la Comunicación Educativa
Reynaldo Jiménez Leyva
Irianny Medel Duarte
Indira Rodríguez Sosa
Volumen: 16
Número: 2
Año: 2024
Recepción: 12/09/2023
Aprobado: 13/02/2024
Artículo de revisión
social, a través de símbolos y sistemas de mensajes, que se produce como parte de la
actividad humana” (p. 5). En la comunicación educativa, este intercambio de
información, conocimientos, ideas y experiencias, genera un aprendizaje.
Fernández (2003) la define como “el campo de aquellas situaciones de comunicación
que de modo intencional tributan al desarrollo humano, al aprendizaje en su más amplio
sentido” (p. 4). Mediante la comunicación los procesos de enseñanza y aprendizaje
logran estar estrechamente vinculados; los profesores y educandos interactúan con el
propósito de cumplir con los objetivos educacionales propuestos, la enseñanza en sí es
un proceso comunicativo que busca desarrollar en el educando las capacidades
comunicativas, la solución de tareas y la adquisición de nuevos conocimientos (Borroto
et al., 2014).
Es decir, el proceso de comunicación debe ser claro y completo para lograr el efecto
deseado. El educador debe tener en cuenta al educando, sus puntos de vista, sus
ideas; es ahí donde el alumno desarrolla su personalidad y crecimiento personal a
través de un proceso más activo y flexible. Es por ello que la comunicación educativa
no solo se reduce al ámbito escolar, sino que se produce en aquellos contextos donde
se manifieste la voluntad de educar.
Como aclaran Borroto et al. (2014), existen modelos comunicativos que están en
estrecha relación con los modelos educativos, y que enfatizan elementos de la
educación y la comunicación entre profesor y alumno. Esto permite el desarrollo de las
Competencias comunicativas, que surgen como resultado de la destreza de la lengua, a
través de las experiencias, conocimientos, habilidades que se han adquirido con el
tiempo. Mediante estas competencias el docente desarrolla aptitudes que benefician el
proceso de enseñanza aprendizaje en el alumno.
Según lo anterior descrito, el profesor debe estimular el aprendizaje de su alumno
mediante métodos creativos que lo motiven y lo incentiven a profundizar sus
habilidades, a que puedan construir sus conocimientos paulatinamente, donde el
estudiante pueda razonar, opinar, criticar, mediante un pensamiento creativo, reflexivo e
innovador. Esto permite una mayor calidad en el proceso de enseñanza aprendizaje,
que asciende proporcionalmente junto a la formación del docente como profesional. Por
tanto, el proceso de enseñanza-aprendizaje es básicamente interactivo y comunicativo,
donde ocurre una transformación de la personalidad no solo en el alumno, sino también
en el docente, y en el que se pone de manifiesto el carácter subjetivo de ambas partes.
Para que la comunicación sea eficiente y logre los objetivos educativos, debe tener
ciertos requisitos funcionales: motivadora, persuasiva, estructurante, adaptativa,
generalizadora y facilitadora de la inteligibilidad (Córica, 2012). Esto significa que el
educando, a partir de su interacción con el alumno, debe tener en cuenta las formas en
que puede captar su atención y a su vez la influencia en su crecimiento personal, lograr
de igual manera el aprendizaje con la obtención de un conocimiento flexible e
innovador.
Página 125