La orden Caballero de la Luz en Las Tunas  
Karel Pérez Ariza  
Volumen: 15  
Recepción: 15/09/2022  
Número: 4  
Aprobado: 30/06/2023  
La Orden Caballero de la Luz en Las Tunas  
Order Caballero de la Luz in Las Tunas  
Karel Pérez Ariza1 (karelperez86@yahoo.com) (https://orcid.org/0000-0002-7650-7022)  
Resumen  
Los estudios históricos sobre las asociaciones fraternales constituyen un reto para la  
historiografía cubana. El abordaje de la temática requiere, tanto de análisis desde  
perspectivas nacionales, como regionales y locales. Aunque existen estudios sobre las  
logias tuneras, se centran en la localidad cabecera y no contienen un estudio integral  
sobre una asociación en particular. Además, en ellos se ausentan o se tratan de forma  
limitada aristas significativas de su accionar social y para la historiografía nacional, tales  
como: la labor benéfica, el accionar cívico y en particular, el dirigido a la recepción  
martiana; así como el apoyo ofrecido al Gobierno Revolucionario de 1959.  
Consecuentemente, el objetivo del artículo reside en develar la contribución de la Orden  
Caballero de la Luz a la sociedad tunera. La investigación se basó, fundamentalmente, en  
el análisis de documentos producidos y atesorados por la fraternal asociación.  
: Orden Caballero de la Luz, asociación fraternal, historia de Las Tunas  
Palabras claves  
Abstract  
Historical studies on fraternal associations constitute a challenge for Cuban  
historiography. The approach to the subject requires analysis from national, regional and  
local perspectives. Although there are studies on the Tunera lodges, they are centered  
on the head locality and do not contain an integral study on an association in particular.  
In addition, significant aspects of their social action and for the national historiography  
are absent or treated in a limited way, such as: the charitable work, the civic action and  
in particular, the one directed to the reception of Marti; as well as the support offered to  
the Revolutionary Government of 1959. Consequently, the objective of the article  
resides in revealing the contribution of the Order Caballero de la Luz to the Tunisian  
society. The research was based, fundamentally, on the analysis of documents  
produced and treasured by the fraternal association.  
Key words: Order Caballero de la Luz, fraternal association, history of Las Tunas.  
Estudios históricos sobre las asociaciones fraternales  
Las asociaciones fraternales han constituido una importante forma de asociación en  
Cuba, durante más de dos siglos (Barreto y Hernández, 2019; Fonseca, 2019; Negrín y  
Fernández, 2018; Pérez, 2018; Sánchez, 2022). No obstante, han sido un objeto de  
estudio escasamente tratado en la historiografía cubana, sobre todo si se compara con  
el número y calidad de las publicaciones sobre estudios masonológicos en América  
Latina, España y otras regiones del orbe (Ferrer, 2018; Guzmán, 2018; Parada, 2018;  
1
Doctor en Ciencias Pedagógicas. Profesor Auxiliar. Departamento de Español. Universidad de Estudios  
Internacionales de Jilin, República Popular China.  
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Soberanes y Martínez, 2018). De forma general y a juicio del articulista, a pesar de las  
publicaciones existentes, su abordaje constituye un reto para la historiografía cubana.  
Una de las fraternidades más extendidas y consolidadas en el territorio cubano, resulta  
la Orden Caballero de la Luz. Ello queda avalado por las más de 300 logias constituidas  
a lo largo y ancho del país, en las que llegaron a militar unos 30 000 miembros en la  
década de los años 50, o sea, 30 años después de los inicios de su institucionalización  
en suelo cubano (Pérez, 2018). Además, esa asociación tiene la peculiaridad de haber  
sido fundada por cubanos con el propósito de contribuir al movimiento independentista  
iniciado en 1868 (Pérez, 2020, 2021).  
Si bien no existe un estudio monográfico e integral sobre la Orden Caballero de la Luz  
en el territorio nacional, hay que señalar que existen investigaciones que abordan la  
temática desde una perspectiva regional y local (Pérez 2017 y 2018). En el caso  
particular de Las Tunas, existen algunos estudios (Medina, 2012; Medina y Mora, 2017)  
que, aunque no se dedican íntegramente a la asociación de referencia, poseen el  
mérito de develar algunos vínculos entre su devenir histórico y la vida sociocultural del  
territorio. Sin embargo, hay que acotar que se centran en la localidad cabecera,  
limitando así la comprensión de su institucionalización y funcionamiento en todo el  
territorio tunero.  
Aristas significativas tanto en la labor de la referida institución, como para la  
historiografía cubana resultan ausentes o son insuficientemente abordadas. Algunas de  
ellas resultan el accionar benéfico, la labor cívica en general y de forma particular, la  
dirigida a la recepción martiana; además del apoyo al Gobierno Revolucionario de 1959.  
Consecuentemente, con este artículo se persigue el objetivo de develar la contribución  
de la Orden Caballero de la Luz a la sociedad tunera.  
Institucionalización en el territorio tunero  
El proceso de institucionalización de la Orden Caballero de la Luz, en el actual territorio  
tunero, data de inicios de la década de los años 40 del siglo XX. Tiene la particularidad  
que inicia con la fundación de una logia no solo fuera de los límites de la cabecera  
municipal, sino de la entonces demarcación tunera. Se trata de la logia Jimaguayú No.  
74, establecida el 20 de diciembre de 1942, en el territorio del actual municipio tunero  
Amancio Rodríguez (antiguo Francisco), el cual pertenecía a la antigua provincia de  
Camagüey, cuna de la institución en el interior del país y donde ya existían decenas de  
logias.  
A partir de 1972, las logias constituidas en Elia, antiguo territorio camagüeyano y actual  
municipio tunero de Colombia, también pasaron a pertenecer al territorio tunero. Por su  
parte, la ubicación geográfica de la provincia y en particular, sus límites con el territorio  
holguinero, lugar donde al igual que en Camagüey también existían logias con un sólido  
funcionamiento, favoreció la propagación de la institución por dos municipios más: el  
cabecera y Puerto Padre. Tales condiciones permitieron la existencia de logias en todos  
los municipios tuneros, con la excepción de Majibacoa.  
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La última logia fundada en suelo tunero fue la Luis Manuel Suárez No. 97, constituida  
en Manatí (actual municipio Jesús Menéndez), el 8 de enero de 1961. De allí que, en el  
territorio, en un periodo de casi dos décadas se crearon 24 logias, entre las que había 9  
logias femeninas (6 de mujeres y 3 de niñas) y 15 masculinas (10 de hombres y 5 de  
niños). A pesar que existe una tendencia al predominio de las logias masculinas, se  
aprecia un mayor equilibrio con respecto a otras localidades y regiones, lo que se hace  
evidente en estudios precedentes (Pérez, 2017 y 2018) realizados por el propio autor  
de la presente investigación. La tabla que se muestra a continuación refleja estas y  
otras informaciones al respecto.  
Municipios  
Hombres Mujeres Niños  
Niñas  
TOTAL  
Las Tunas  
Amancio Rodríguez  
Colombia  
2
1
1
1
1
2
1
-
1
1
1
-
-
4
4
1
1
-
1
4
Puerto Padre  
Jobabo  
2
4
1
1
1
-
1
-
4
Manatí  
2
3
Jesús Menéndez  
TOTAL  
1
-
-
1
10  
6
5
3
24  
Tabla 1. Cantidad de logias fundadas en Las Tunas, por tipo y municipio. Fuente: elaboración propia.  
Patrimonio edificado  
La consolidación de la institución, en el territorio, trajo consigo la realización de obras  
constructivas, tales como los inmuebles empleados como sede social (casas-templos).  
Aunque se construyeron casas-templos en todas las localidades donde radicaron  
logias, tales inmuebles no alcanzaron valores arquitectónicos trascendentales;  
fenómeno que refleja la existencia de una membresía, al menos en términos generales,  
con modestos ingresos económicos. No obstante, por sus valores arquitectónicos y  
culturales, devienen en parte del patrimonio edificado del territorio.  
La primera casa-templo fue inaugurada el 21 de diciembre de 1947 en el actual territorio  
del municipio Amancio Rodríguez, localidad perteneciente a la antigua provincia de  
Camagüey (Pérez, 2018). Los restantes inmuebles, que servirían de sede social de las  
logias tuneras, se construyeron en la década de los años 50, como resultado del  
impacto positivo de la política de la Suprema Logia (organismo rector de la institución)  
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de favorecer la construcción de inmuebles propios, para las logias existentes en cada  
localidad, a la que se extendiera la asociación. Tal fenómeno refuerza la idea de la  
existencia de una membresía tunera con modestos recursos económicos y, por ende,  
más dependiente de la ayuda económica de los organismos superiores de la institución.  
Aunque la forma constructiva de cada casa-templo responde a la época y los recursos  
materiales disponibles para ello, la estructura de las referidas edificaciones coincide en  
componerse de: salón social, templo, secretaría y patio. Sus inauguraciones devinieron  
en verdaderos acontecimientos sociales y culturales, debido a la diversidad y naturaleza  
de las actividades programadas, así como la amplia participación social. Por ejemplo:  
1. En la inauguración de la casa-templo de la logia Jimaguayú No. 74, en el central  
Francisco (actual municipio Amancio Rodríguez), participaron más de 700  
personas, se develó un busto de Luz y Caballero en la escuela pública del batey  
y se realizó un desfile acompañado de la Banda Municipal de Música de Santa  
Cruz del Sur (Pérez, 2023b).  
2. El 30 de agosto de 1952, al inaugurarse la casa-templo de las logias de la ciudad  
de Las Tunas, se ejecutó un amplio programa de actividades culturales, entre las  
que estuvieron: un desfile y depósito de ofrenda floral al busto de Martí en un  
parque público y la realización de una fiesta bailable (Pérez, 2023b).  
Paralelamente a la construcción de casas-templos, las logias laboraron también en la  
construcción de panteones colectivos en los cementerios de las localidades donde  
estaban enclavadas. Esta era una forma de cumplimentar uno de sus basamentos  
fundamentales, el cual reside en honrar a sus difuntos. Aunque cada panteón poseía el  
Reglamento que la logia o logias con derecho al mismo aprobaban, era costumbre casi  
generalizada autorizar la sepultura en él de miembros en activo, sus hijos menores de  
edad y sus viudas.  
Estas construcciones también constituyen por su valor arquitectónico en algunos  
casos y por su valor histórico y cultural en casi todos significativos aportes de la  
institución al patrimonio edificado. Un considerable número de ellos posee elementos,  
usados por la asociación con determinados mensajes exotéricos, los cuales atesoran  
una parte de su extenso caudal ético e ideológico como son: el ara, los candelabros y  
símbolos alegóricos a la muerte. Por otra parte, allí se encuentran los restos mortales  
de figuras destacadas de la provincia en las esferas educacional, cultural, la política,  
entre otras.  
Recepción martiana  
La denominación de las logias fue una de las vías más importante de recepción  
martiana. En el territorio tunero se fundaron 5 logias que así lo atestiguan: Hijas de El  
Apóstol No. 63, es el nombre que más directamente alude al más universal de los  
cubanos; no obstante, también se escogieron nombres que aluden a la obra martiana  
(La Edad de Oro No. 31, La Rosa Blanca No. 70) y a personalidades que han sido  
destacadas en la historiografía por su vínculo a Martí (Lino Figueredo No. 17 y Ángel  
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Laguardia No. 35). De ellas, dos estaban integradas por mujeres y dos, por niños;  
además, una pertenecía a la ciudad cabecera.  
Además, se debe agregar que el nombre escogido, inicialmente, para nombrar a la logia  
Teresa Caballero No. 35, primera logia de mujeres del territorio, era el de la madre de  
Martí; iniciativa que no se pudo materializar, debido a la existencia en Alquízar, de una  
logia con ese nombre y la política del organismo rector de denegar la duplicidad de  
nombres en las asociaciones de base (Pérez, 2023a).  
La conmemoración de fechas relacionadas con la vida de Martí fue otra de las vías  
principales de recepción martiana, ya que desde 1928 se había instituido la  
obligatoriedad de hacerlo (Pérez, 2018). Entre las actividades realizadas con tal fin,  
sobresale el acto realizado por las logias de la ciudad cabecera en 1999, año en que se  
conmemoró el 146 aniversario del natalicio de El Apóstol (Pérez, 2023b).  
También fue recurrente la realización de actos y desfiles, así como el depósito de  
ofrendas florales. De esa naturaleza, resultan memorables las iniciativas realizadas en  
ocasión de la inauguración de las casas-templos de las logias de la ciudad cabecera y  
Manatí, en 1952 y 1956, respectivamente. En ambos casos se realizó un nutrido desfile  
y se depositó una ofrenda floral ante bustos de El Apóstol, que existían en lugares  
públicos de esas localidades.  
La devoción martiana de las logias del territorio, logró una valiosa expresión en la  
construcción de un rincón martiano dentro de la casa-templo de las logias de la ciudad  
cabecera. Fue inaugurado con un bello acto en mayo de 1985, con la presencia del  
máximo dirigente de la institución en la jurisdicción de la Gran Logia Oriental (Pérez,  
2023b).  
Accionar cívico  
Las actividades de carácter patriótico constituyeron uno de los núcleos esenciales del  
accionar cívico de la Orden Caballero de la Luz. En ese sentido, resultan significativos  
algunos acontecimientos ocurridos en el territorio tunero, entre los que se encuentran:  
1. Organización de un acto, el 18 de abril de 1953, por la logia Panchín Varona No.  
110 con motivo del develamiento de un busto de José de la Luz y Caballero en la  
casa-templo de las logias de la ciudad cabecera (Pérez, 2023).  
2. Entrega de un cuadro del Coronel Pedro González, por la logia homónima de la  
localidad de Chaparra, a la Delegación de Veteranos con el fin de incluirlo en la  
galería de patriotas (Pérez, 2023b).  
La educación ha constituido, tradicionalmente, uno de los fines esenciales de la  
Institución. De la labor de esta última, en Las Tunas, resulta memorable el acto  
organizado por la logia Panchin Varona No. 110, en su casa-templo, para rendir  
homenaje a los maestros de la localidad. Por su trascendencia, asistió el Gran Luminar  
Manuel Lorente, quien entregó un diploma al Decano del Colegio de Maestros Dr.  
Rodríguez Zayas (Rodríguez, 1956a). En dicho acto, además, se le hizo entrega del  
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título de Hija Predilecta de la Ciudad, por su labor cívica y aportes a la cultura, a Victoria  
Luisa Licea, quien integraba la logia de mujeres de aquella ciudad (Rodríguez, 1956a).  
Estudios precedentes (Pérez, 2017 y 2018), realizados por el autor del presente  
artículo, permiten confirmar que la concepción de la asociación sobre la función social  
de la educación, sirvió de sustento para la inserción de las instituciones educativas en  
sus actividades de carácter patriótico. Del territorio tunero, resultan ejemplo de ello el  
develamiento, el 21 de diciembre de 1947, de un busto de José de la Luz y Caballero  
en la escuela pública del batey Francisco- actual municipio Amancio Rodríguez –  
(Pérez, 2023) y la peregrinación realizada el 13 de noviembre de 1955, al busto de  
Martí, ubicado en la Escuela Pública No. 5 del poblado de Delicias, como parte del  
programa de actividades por la inauguración de la casa-templo de las logias de la  
localidad (Pérez, 2023).  
Otro hecho significativo resulta la colocación de vallas, por la logia Panchín Varona No.  
110 en las entradas de la ciudad de Las Tunas, con el propósito de prevenir accidentes  
de tránsito (Pérez, 2023).  
Accionar benéfico  
La labor benéfica constituye uno de los fines y fundamentos esenciales de las  
asociaciones fraternales, por lo que deviene en un eje esencial de su accionar y, por  
tanto, de su contribución social. En el estudio del devenir histórico de la Orden  
Caballero de la Luz en Las Tunas, se constata su preocupación por los sectores  
poblacionales en desventaja y en particular, por los niños, los enfermos, los  
discapacitados y los pobres.  
La entrega de canastillas, a familias pobres, fue una acción recurrente por las logias de  
mujeres. Algunas acciones concretas resultan la entrega realizada en el poblado de  
Francisco (actual municipio Amancio Rodríguez), por la logia Ana Betancourt No. 29,  
con motivo del Día de las Madres en 1955 (Rodríguez, 1956b); así como la donación de  
una canastilla por la logia Las Tres Virtudes, en 1958, en el poblado de Elia (León,  
Padrón y Placeres, 1957).  
La logia Ana Betancourt No. 29 también donó uniformes a niños pobres de las escuelas  
públicas e hizo repartos de juguetes por el Día de Reyes (Pérez, 2023). Por su parte, la  
logia Coronel Pedro González No. 161, sobresalió en la entrega de cenas de  
nochebuena a los pobres de la localidad de Chaparra, durante la década del 50 (León,  
Padrón y Placeres, 1957), además de crear un Dispensario Médico para suministrar  
atención facultativa y medicina a enfermos pobres de la localidad, el cual estaba a  
cargo de uno de sus miembros, el galeno Armando Argibay Parrado (Pérez, 2023).  
Las logias tuneras también contribuyeron a la Liga Contra el Cáncer, organización que  
fue apoyada por la Institución en todo el territorio nacional. Entre los meses de febrero y  
marzo de 1957, 10 logias del territorio hicieron contribuciones económicas (Rodríguez,  
1957). Otro hecho significativo en la provincia, resulta la entrega de una silla de ruedas  
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a un joven campesino de Jobabo que perdió sus piernas en un accidente ferroviario, por  
iniciativa de la logia Peralejo No. 143, radicada en esa localidad (Rodríguez, 1956c).  
En el mes de diciembre de 1958, bombardeos ejecutados por aviones del ejército  
batistiano, destruyeron los hogares de varios ciudadanos del poblado de Manatí. La  
logia homónima, radicada allí, le dio cobija a varios de ellos e intercedió ante los  
organismos superiores de la Institución, para solicitar ayuda económica a su favor (Ávila  
e Infante, 1959).  
Apoyo al triunfo revolucionario de 1959  
La Orden Caballero de la Luz, como parte de la sociedad civil cubana, se identificó con  
la Revolución, debido a la participación directa de muchos de sus miembros en la lucha  
(Pérez, 2018). Además, fue testigo presencial y víctima de una forma de gobierno  
dictatorial, por lo que en documentos oficiales de logias y sus organismos dirigentes, se  
emplean los términos: dictadura, tiranía, para calificar el batistato (Ávila e Infante,  
1959).  
El propio tratamiento de temas relacionados con los derrocado y naciente regímenes,  
contraviniendo con ello las tradicionales leyes y prácticas de la asociación, consistentes  
en excluir de su seno los asuntos políticos, constituyen una prueba irrefutable del  
significativo impacto del hecho. Por su parte, si se tiene en cuenta el carácter negativo  
de los calificativos empleados para el régimen derrocado, situación contraria a lo que  
ocurría en torno al nuevo régimen; así como el uso, en sus documentos, de expresiones  
propias de la ideología de la Revolución, tales como: “Año de la Libertad” (Ávila e  
Infante, 1959), se comprueba tal identificación.  
Al triunfar la Revolución la situación económica del país era crítica, por lo que diferentes  
instituciones que estaban a su favor contribuían materialmente al desarrollo de las  
principales tareas. En ese sentido merece especial mención el donativo que hiciera la  
logia Coronel Pedro González No. 161 de Chaparra (actual municipio tunero Jesús  
Menéndez), de las medicinas de su botiquín a los miembros del Ejército Rebelde que  
radicaban en esa localidad (Pérez, 2023b).  
El imperialismo norteamericano y los sectores de la oposición interna se encargaron de  
llevar a cabo una campaña de difamación contrarrevolucionaria. Ante aquella agresión  
imperialista las logias de la Orden Caballero de la Luz brindaron su apoyo y las  
radicadas en Las Tunas, no fueron la excepción. La carta de protesta rubricada por la  
logia Victoria de Las Tunas No. 78 y enviada a la revista neoyorquina “Time and Life  
Building”, por la campaña difamatoria emprendida desde sus páginas, así lo confirma.  
Por su valor histórico, reproducimos una parte significativa de su contenido.  
Estamos observando con profundo disgusto la Campaña Insidiosa que viene  
desarrollando esa revista contra el Gobierno Revolucionario, falseando la verdad y  
tergiversando los hechos.  
El actual Gobierno Revolucionario que tiene como guía al Dr. Fidel Castro Ruz, es un  
gobierno limpio y puro, preocupado de las necesidades de su pueblo, teniendo como  
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meta deseada la REFORMA AGRARIA, que parece haber sido tan mal comprendida por  
algunos sectores. Un país como el nuestro con una economía esencialmente agrícola,  
no podría actualizar sus recursos naturales, diversificar su producción con la tierra en  
manos de una minoría exigua, que la explotaba en una proporción también muy baja,  
con perjuicio de nuestro pueblo, esta es una necesidad que imperativamente había que  
afrontar.  
El Dr. Castro y su gobierno tienen el apoyo del pueblo cubano, no tiene matiz comunista  
ni un nacionalismo empequeñecedor. El Gobierno Cubano responde a los intereses,  
anhelos de un pueblo que como el nuestro ha sufrido mucho, que tiene un profundo  
amor por la Libertad y que está muy consciente de su destino que no puede ser otro que  
autodeterminarse, llevar a la dirección pública sus virtudes, actualizar sus riquezas  
materiales y espirituales.  
Esta institución, ORDEN CABALLERO DE LA LUZ, a la cual pertenecemos, nacida en  
las luchas clandestinas revolucionarias por libertar a Cuba del yugo español, está  
formada por hombres amantes de la verdad, de sereno juicio, padres de familias en casi  
su totalidad, agrupa en su seno a todos los sectores de la sociedad, por lo que creemos  
representar bien al pueblo cubano.  
En casi todos nuestros hogares se recibía LIFE desde hace tiempo, revista que hemos  
querido y admirado con su mensaje ameno, bellamente presentado que estimábamos  
respondía a todos los más altos ideales de un pueblo.  
Desde que la Revolución Cubana derrotó al tirano hemos observado las campañas de  
mentiras y falsedades que trae de Cuba, no quisiéramos pensar que mala fe o intereses  
existen, se hace aparecer a nuestro pueblo y nuestro Gobierno como no es.  
No nos queda otro recurso que cerrar las puertas de nuestros hogares y de nuestras  
instituciones a LIFE y a otras publicaciones que mantienen con relación a nuestro país  
sus criterios errados y quedamos con el vacío que deja renunciar al trato de quienes  
quisimos y admiramos.  
Queremos prevenir a esa dirección que una parte de nuestro pueblo no alcanza a  
diferenciar el criterio de una publicación, y el sentir de toda una nación comienza a  
manifestar sentimientos de agravio que devendrán en hostilidad como resultado de lo  
que hoy por ustedes se expresa e insinúa sobre la Revolución Cubana. Es muy doloroso  
que así suceda. La responsabilidad será de ustedes por entero.  
Es bueno recordar que el pueblo cubano ha sido tradicionalmente amigo del pueblo  
norteamericano al que hemos estado ligados histórica, económica y culturalmente. Esos  
lazos de profunda amistad entre nuestros pueblos están siendo dañados por las  
campañas de mentiras que está desarrollando esa publicación. No alcanzamos a  
comprender cómo pueda renunciarse a la amistad de un pueblo, que tantas muestras de  
lealtad ha dado, como en el caso nuestro, por servir intereses no solo minoritarios sino  
(Logia Victoria de Las Tunas No. 78, 1959).  
muy dudosos.  
En torno a la misiva también resulta significativo el empleo, en su encabezamiento, de  
la expresión: “Año de la Liberación”. Eso no resultaba ni resulta una práctica común en  
las asociaciones fraternales, debido a la tradicional prohibición en sus leyes internas, de  
inmiscuirse en asuntos políticos. Por tanto, ello refuerza la idea de la significación del  
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triunfo revolucionario para la sociedad cubana, de la que formaban parte también las  
asociaciones pertenecientes a la Orden Caballero de la Luz, así como la consecuente  
postura de apoyo asumida por esta última.  
Del territorio tunero también resulta significativa la declaración conjunta, publicada por 6  
de sus logias, tras la reunión conjunta realizada el 19 de agosto de 1960. Se reunieron  
en la casa-templo de las logias de la ciudad cabecera y además de estas, participaron  
logias de Puerto Padre, Delicias y Manatí. Entre otras ideas, manifestaron las  
siguientes:  
Segundo: Entendiendo que en los actuales momentos que vive la nación, reclama de  
sus hijos el máximo de esfuerzo para encaminar la patria por senderos de verdadera  
liberación política y económica, que consoliden nuestra soberanía de una manera firme y  
permanente.  
Es traición a la Patria permanecer callados, en un silencio culpable y no brindar nuestro  
apoyo a los hombres que gallardamente han sabido poner muy en alto el pabellón de  
nuestra patria en todas las latitudes del mundo.  
Tercero: Creemos firmemente que lo que se debate en nuestra patria, es su soberanía,  
su Independencia y un futuro mejor para sus hijos, no una ideología extraña como se  
intenta propalar con intentos divisionistas, por los grandes intereses afectados por las  
medidas de la Revolución; que alentados por potencias extranjeras si intentan pisotear  
de nuevo nuestra bandera y restablecer en nuestro suelo el mismo sistema feudal y  
colonialista con que hasta ayer nos esclavizaban.  
Creemos firmemente que nuestra revolucione s nacionalista como bien lo ha demostrado  
con la nacionalización de las empresas extranjeras.  
Creemos firmemente que esta Revolución está desarrollando las necesarias  
transformaciones que las clases más explotadas estaban clamando.  
(…)  
Quinto: Por todo lo antes expuesto y por muchas razones más que harían interminable  
su enumeración, las logias que anteriormente se mencionan, todas de la Orden  
Caballero de la Luz, declaran públicamente su respaldo absoluto y sin reservas a todas  
las medidas del Gobierno Revolucionario de la INDEPENDIENTE Y SOBERANA  
REPUBLICA DE CUBA. Y exhorta por medio de este documento a todas las  
instituciones para que sin titubeos ni apatías definan su postura en estos gloriosos e  
históricos momentos que nos ha tocado vivir. (Pérez, 2023b, pp. 63-64).  
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Consideraciones finales  
La institucionalización de la Orden Caballero de la Luz, en el territorio tunero, tuvo su  
origen en los inicios de la década de los años 40 del pasado siglo y tiene como  
particularidad que las primeras logias fueron fundadas en demarcaciones de la antigua  
provincia de Camagüey y no, en la cabecera provincial. Entre las principales  
contribuciones de la asociación, a la sociedad tunera, se encuentran: su accionar cívico,  
benéfico y de recepción martiana, además de su apoyo al triunfo revolucionario de  
1959.  
Referencias  
Ávila, R. y Infante, M. (18 de febrero de 1959). Comunicación de la logia Manatí No. 216  
a la Suprema Logia. La Habana, Cuba: Archivo de la Suprema Logia de la Orden  
Caballero de la Luz.  
Barreto, G. y Hernández, C. (2019). Ciudad de leyenda e historias 9. Restauración del  
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Karel Pérez Ariza  
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